17 de diciembre de 2012

sabel Allende muestra nuevas armas: debuta en la novela policial


Isabel Allende muestra nuevas armas: debuta en la novela policial
Se llama Ripper y nace de un juego de rol inspirado en Jack el Destripador. Saldrá en 2013.
“¿Por qué no escribes una novela con Willie?”, le dijo su agente Carmen Balcells a
 fines de 2011. Isabel Allende recién había cerrado la promoción de su exitoso libro El cuaderno de Maya y decidió intentarlo: invitó a su esposo, el también escritor Willie Gordon, a poner manos a la obra.

“Willie escribe novelas policiales y decidimos que haríamos una juntos. ¡El trabajo duró 24 minutos! Y comprendimos que nos íbamos a asesinar”, cuenta entre risas la escritora chilena sobre la idea que no fructiferó. “Los dos tenemos distintas maneras de trabajar”, agrega.

Sin embargo, a la narradora y Premio Nacional de Literatura 2010 le quedó una historia dando vuelta. Se llama Ripper, es su debut en la novela policial y saldrá en 2013.

Así lo cuenta en Santiago. Viajó desde California, donde vive desde hace más de 20 años, a ver a sus padres. Siempre se hace un tiempo en su apretada agenda. En España acaba de salir su libro Amor y en 2013 se estrena en la Opera de Los Angeles Dulce Rosa, dirigida por Plácido Domingo, basada en su cuento Una venganza (ver recuadro).

La escritora fue la gran ausente en la Feria de Guadalajara, donde Chile fue el país invitado: “Tengo que elegir en qué invierto mi energía, porque es demasiado el boche que se arma”, dice.

El destripador

“Un día vi a mi nieta Andrea con sus amigos jugando un juego de rol, que se llama Ripper”, cuenta Isabel Allende. El juego aludía a Jack el Destripador, en inglés Jack the Ripper.

“La novela parte con unos niños jugando ese juego de rol, luego se desarrollan una serie de historias relacionadas entre sí, como las cajas chinas”, relata. El libro lo entregó sólo hace algunas semanas a su agente.

“Pedí que se conserve el título para su traducción al español, porque destripador es muy feo”, señala. El escenario de la novela es San Francisco, en California, Estados Unidos. “El libro es muy actual. Todo transcurre el 2012. Ni antes ni después”, dice.

Pese a no ser lectora de novelas policiales, se aventura en uno de los géneros más populares, que vive un renovado auge con el éxito mundial de la saga Millennium, de Stieg Larsson. “Por lo mismo escribirla fue mucho más libre, pude jugar más”, asegura. Sobre sus eventuales lectores, comenta: “No tiene clasificación, es para todas las edades”.

El guiño inicial de Ripper, inspirado en su nieta y sus amigos jugando rol, es lo único más cercano a su vida. “No hay material de mi biografía ni aparecen personajes de mis libros anteriores”, señala Allende, quien se prometió no involucrar más a su familia en sus obras. Lo hizo en Paula (1994), donde narra su vida y la de sus orígenes mientras acompaña a su hija en estado de coma. Tras su muerte, las escenas del duelo abren su libro La suma de los días (2007), que da pie al relato de su conflicto matrimonial y cómo lidió con la drogadicción de los hijos de su marido. “Mis últimos libros han sido sobre mi familia. Ya no tengo derecho a usar las vidas ajenas”.

Sobre escribir sus memorias, ni hablar. “Nunca las escribiré, porque no me acuerdo de nada, se me borran las caras, las fechas. Ahora terminé de leer Joseph Anton, las memorias de Salman Rushdie, y él se acuerda, por ejemplo, de las personas con las que cenó en un evento determinado, años atrás”.

Fantasías

La autora de La casa de los espíritus cuenta que le han pedido que escriba sobre otros. “Me ofrecieron hacer la biografía de Salvador Allende y Michelle Bachelet, pero no tengo la capacidad ni me corresponde”.

La escritora viva más leída en español no sólo se dedicó a escribir Ripper este año. También hizo una selección de escenas románticas y eróticas de sus libros. El resultado es Amor, volumen recién publicado en España por Plaza & Janés, que llegará un día nada de casual: el 14 de febrero.

En agosto, la escritora cumplió 70 años. Su editor alemán le propuso celebrarlo con un libro. “Mi vida sexual comenzó a los cinco años, en las monjas Ursulinas. Fue cuando me tragué una muñeca de baquelita y una compañera me dijo que estaba embarazada”, dice riendo, pero luego recuerda que la echaron del colegio: “Yo creo que fue porque mi mamá estaba separada. Era un Chile conservador, un colegio anticuado”.

Sobre la saga erótica Cincuenta sombras de Grey, de E. L. James, Allende dice: “En cada generación hay un libro así, que incluye un gran atractivo sexual. Es el sexo sin culpa. Eso sí, mis fantasías eróticas no tienen nada que ver con esto, lo último que se me ocurriría es que me pegaran”, comenta sobre las escenas de sadomasoquismo en la trilogía de James.


Fuente: La Tercera